Mantener un buen clima laboral en la empresa es vital para el desarrollo y crecimiento de ésta. Son las personas quienes hacen posible, cada día, que la empresa atienda las necesidades de sus clientes y las satisfaga pero son también las personas quienes aseguran que la empresa se comporte conforme se espera de ella en la sociedad.
Una comunicación libre y abierta entre equipo directivo, empleados y otras partes interesadas será imprescindible si lo que queremos es, definitivamente, garantizar un buen ambiente de trabajo y una conducta irreprochable de la organización. En eso, el canal de denuncias tiene mucho que aportar, ya que se presenta como un mecanismo adicional para garantizar que todos puedan hacer lo correcto sin temor a las represalias.
CANAL DE DENUNCIAS: QUÉ ES Y PARA QUÉ SIRVE
El canal de denuncias es, de hecho, una herramienta esencial en esa comunicación entre empleados y organización. En este canal, las personas encuentran una vía a través de la que compartir con sus superiores todo tipo de conductas irregulares detectadas en su entorno laboral, de forma anónima o confidencial, según lo establecido por la empresa.
Será la dirección quien, recibida y analizada la información de parte del equipo de compliance, aplique los protocolos establecidos para dar solución a la situación alertada.
Así pues, el canal de denuncias funciona siempre enmarcado dentro de un plan más amplio, un plan o sistema de compliance o cumplimiento normativo. En dicho plan se establece cómo deberá actuar la empresa ante una denuncia, cómo se investigará y resolverá cada caso; también se define un plan de formación que capacite al equipo para el uso del canal de denuncias y un código ético o una política de cumplimiento (compliance) que establezca los compromisos de la empresa.
¿POR QUÉ MI EMPRESA DEBERÍA TENER UN CANAL DE DENUNCIAS?
En abril de 2018 la Comisión Europea aprobó la sobre la protección de los denunciantes de corrupción o fraude y violaciones de las leyes en los países de la Unión Europa, donde se establece la obligación de contar con un canal de denuncias para aquellas empresas que cumplan las siguientes características:
- Empresas privadas que cuenten con una plantilla de, al menos, cincuenta empleados.
- Empresas privadas con una cifra de negocio o un balance anual de al menos diez millones de euros.
- Empresas privadas que operen en el ámbito de los servicios financieros o se encuentren afectadas por la regulación relativa a la prevención de blanqueo de capitales y financiación del terrorismo.
- Entidades de la administración estatal.
- Entidades de la administración regional y sus departamentos.
- Entidades de municipios de, al menos, diez mil habitantes.
- Otras entidades reguladas por Derecho Público.
Esta Directiva está actualmente en trámite de aprobación en el Parlamento Europeo, como paso previo para su aplicación obligatoria por los países miembros de la UE.
Más allá de la obligación legal, sin embargo, la implantación de un canal de denuncias en la organización puede suponer una ventaja competitiva ante su público, tanto interno como externo, dado que:
- Crea una imagen de transparencia en la empresa. Al permitir la comunicación libre y confidencial entre equipo y alta dirección, la empresa proyecta su capacidad de hacer frente de forma abierta a los conflictos.
- Representa una muestra de compromiso. Permite poner en valor el código ético de la organización, estableciendo mecanismos efectivos para evitar posibles irregularidades, se compromete con sus valores y, por lo tanto, con lo que aporta al mundo. Cuando, además, el canal se abre a clientes, proveedores y otras partes interesadas este compromiso se refuerza.
- Reduce costes reputacionales y económicos. Todo incumplimiento que tiene lugar en la empresa representa un coste para ésta, ya sea a nivel reputacional o económico. Detectarlos anticipadamente y saber gestionarlos reducirá considerablemente este coste.
Poner al alcance del equipo herramientas de comunicación es, en todos los casos, una apuesta segura. Prepararse para gestionar las posibles incidencias que puedan surgir, aportará a la empresa el equilibrio necesario para un crecimiento sólido.
Ya no se trata solo de cumplir la ley, se trata de asegurar que la empresa cumple sus compromisos con la Sociedad.